Seguro que en alguna ocasión te has planteado ¿cómo podría mejorar el rendimiento de mi negocio para que fuera más productivo y rentable? y es que, muchas empresas suelen complicarse con una estructura y forma de trabajar un poco compleja, rígida y costosa y en cambio, deberíamos tener en cuenta que poder mejorar el rendimiento de nuestro negocio a veces es más sencillo de lo que pensamos.
Antes de empezar, deberías trazar un plan que te permita improvisar, evolucionar y planificar a corto plazo ya que, el mercado va cambiando constantemente y tu empresa debería estar actualizada en todo momento porque si no, tu competencia podría adelantarte y/o sustituirte.
Las empresas necesitan contar con un plan de crecimiento y modelo de negocio escalable ya que, las necesidades de los usuarios van cambiando y tu empresa debería contar con una solución que sea capaz de satisfacer las necesidades de tus clientes.
- Cuida tu imagen corporativa.
Es muy importante crear buena impresión y como se dice “la primera impresión es la que cuenta” y por ello, tu empresa debería tener una línea corporativa cuidada. Cuida tu marca e implica a todos tus trabajadores para que también lo hagan.
- Consistencia y seguridad.
A través de nuestra marca e imagen, vendemos una forma de hacer las cosas y nuestros clientes seguramente lo tengan en cuenta a la hora de querer trabajar con nosotros por lo que, si constantemente estamos cambiando tipografías, colores, formas de envasado… nuestra imagen perderá solidez y consistencia.
Si la línea o el logo del que dispone tu empresa ves que no está actualizado con el momento actual y el mercado, piensa en darle una vuelta y cambiarlo y a partir de ahí, define una línea de trabajo para toda la empresa.
- Dedica tiempo para el marketing y las ventas.
Estar en la oficina atendiendo a los clientes es muy importante, pero deberíamos tener en cuenta que dedicarle tiempo al marketing y las ventas, es igual o más importante ya que, es necesario dedicarle tiempo a la captación de clientes nuevos y fidelizar a los que ya están con nosotros.
- Organiza tu horario y planifícate.
En ocasiones desplazamos en el tiempo algunas tareas que tenemos pendiente, pero, es necesario que las cosas importantes, no se conviertan en urgentes por lo que, organiza tu horario y planifícate para que te dé tiempo tanto para atender a tus clientes actuales como para captar clientes nuevos.
Además, es importante crear un proceso de ventas que te reporte clientes de forma continua.
- Ser capaz de ponerte en el lugar de tu cliente.
En ocasiones, nos encontramos con empresas que carecen de empatía y no son capaces de ponerse en el lugar del cliente, haciéndoles responsables de sus quejas. Es cierto que no siempre los clientes tienen razón, pero la empresa no puede permitirse no ser capaz de ponerse en el lugar de su cliente.
Plantea la opción de asesoramiento de profesiones y seguramente te sorprenderás de la cantidad de factores, mejoras y alternativas que tienes a tu alcance y tu tarea será entonces más fácil.
- Aporta valor a tus clientes.
Cada día nacen nuevas empresas y las que ya estaban, invierten en su imagen para diferenciarse del resto de empresas de la competencia y conseguir la cuota de mercado que se hayan marcado en el plan de marketing por lo que, es necesario que tengas presente cuál es el valor añadido que te diferencia del resto y qué aportan tus servicios y/o productos a tus clientes.
- No dejes de innovar y actualizarte.
- Hoy en día, es importante el entorno digital por lo que, intenta tener presencia en internet a través de una web y/o redes sociales, por ejemplo, para que tu público objetivo tenga más fácil poder encontrarte. Contar con estos canales hará que puedas ofrecer descuentos, vales, información sobre las últimas tendencias de forma sencilla y muy económica.
- Crea un sistema de recompensa de lealtad para clientes, es importante fidelizar a los clientes.
- Simplifica los procedimientos.
Lo bueno, si es breve, es dos veces bueno, esta frase deberíamos tenerla en cuenta siempre en la empresa, desde el primer contacto con el cliente hasta el final de nuestra relación. Formularios, información sobre productos, solicitud de presupuesto, atención técnica… el procedimiento debe ser lo más simple posible. Un buen diseño de procesos (ventas, catálogos, entregas…) puede suponer que el cliente potencial se convierta en cliente de la empresa.
- Formación continua para tus empleados.
Sea lo que sea tu producto y/o servicio, tus empleados deben estar formados y actualizados en todo momento ya que esto les aportará seguridad ante un cliente.
- Haz uso de la tecnología.
Olvida llevar las cosas en papel, Excel o post-it, estamos en la época de la tecnología y deberíamos contar con herramientas que nos faciliten el trabajo de cada día, siendo más productivos y eficaces.
- Actúa rápido.
Desde el primer contacto del cliente con nosotros, que normalmente es cuando nos solicita información o un presupuesto, deberíamos tener una respuesta rápida y con la información que precisa el usuario para así, evitar que otras empresas del sector nos adelanten. Es muy importante que los usuarios/clientes se lleven una buena impresión de nuestro servicio preventa.
Para conseguir llevar a cabo todos los puntos anteriores, no es necesario ser una empresa con muchos recursos económicos ya que actualmente, hay una gran oferta de programas de gestión que te permiten llevar a cabo de una forma sencilla cada uno de ellos y es que, los ERP te permiten mejorar el proceso de tu negocio y ayudan a digitalizar la empresa. Estos programas ponen el foco en tus clientes para entregar un servicio excelente.
Los ERP mejoran la organización de tu negocio permitiendo tener un control de los servicios y/o productos que ofreces.
Para obtener un mejor resultado y mejorar las capacidades de coordinación y colaboración de tu equipo, te recomendamos disponer de un CRM ya que es una forma de darle recursos a tus empleados para que optimicen su tiempo y logren mejores resultados.
Con el CRM, tus trabajadores podrán llevar un control de cada cliente en todo momento ya contarán con una ficha cliente que facilitará toda la información que hayamos incluido del mismo y que cualquier trabajador podrá acceder en cualquier momento, se podrá llevar el control y seguimiento de las visitas y llamadas, gestión de incidencias, productos contratados…
Cuando estés buscando un software de gestión para tu empresa, deberías tener en cuenta de que el programa pueda adaptarse a las necesidades de tu negocio en la actualidad y cuando las variables de mercado cambien.
